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En el ecosistema empresarial actual, el acceso a una consultoría estratégica de alto nivel siempre ha sido un privilegio reservado para las grandes corporaciones, con tarifas que a menudo superan el millón de pesos. Esta barrera económica dejaba a las pequeñas y medianas empresas (PyMEs), el verdadero motor de la economía, operando en la oscuridad de la improvisación. Sin embargo, una innovadora plataforma chilena, FirstMove, está reescribiendo esta dinámica, fusionando la potencia de la Inteligencia Artificial (IA) con el criterio de la consultoría senior para democratizar el análisis estratégico.
El cambio es radical: lo que antes tomaba semanas y una inversión considerable, ahora se comprime en tan solo cinco días hábiles, ofreciendo a los líderes de PyMEs una hoja de ruta clara y accionable a un coste significativamente más accesible. En lugar de informes densos, FirstMove entrega una cartografía estratégica concisa que define tres prioridades críticas, sus respectivos indicadores clave de rendimiento (KPIs) y un plan de ejecución detallado para los próximos 90 días. La meta es simple: permitir que las empresas tomen decisiones basadas en evidencia esta semana, no dentro de cinco.
Este modelo disruptivo no es fruto del azar. El equipo fundador de FirstMove invirtió tiempo crucial asesorando gratuitamente a más de 3.000 empresas. Este ejercicio de inmersión reveló un patrón inquietante: las PyMEs se ahogan en la ejecución táctica sin una brújula estratégica clara. Las brechas más comunes incluían la falta de tiempo para la planificación, la dispersión de métricas y una peligrosa tendencia a priorizar el día a día sobre la visión a largo plazo.
Ese feedback directo del campo de batalla se tradujo en un producto intencionalmente minimalista y accionable, diseñado para gerentes y consultores con agendas saturadas. Como subraya Rodrigo Maulén Torres, fundador de FirstMove, la solución a los problemas de las PyMEs no se encuentra en más diapositivas, sino en la claridad: «Las PyMEs no necesitan más slides: necesitan foco, plazos y responsables», sentencia Maulén Torres. Con este enfoque, FirstMove logra acercar una consultoría aplicada —cuyos costos habituales rondan o superan el millón de pesos— a un precio al alcance de las pequeñas estructuras, garantizando un entregable de valor en menos de una semana.
La clave de esta velocidad reside en su modelo híbrido: la IA se encarga de procesar grandes volúmenes de datos y ordenar la información de manera eficiente, mientras que el criterio senior de consultores experimentados asegura que la estrategia resultante sea pertinente, aterrizada y adaptada a la realidad específica de la empresa. Este binomio garantiza no solo rapidez, sino también calidad y rigor en el análisis.
El entregable final es notablemente práctico: un «1-pager ejecutivo» que resume la estrategia y un tablero interactivo montado en Notion para el seguimiento. Esta combinación asegura que la estrategia no se quede archivada, sino que se convierta en una herramienta de gestión viva. Además de los planes accesibles para PyMEs individuales (Express, Básico, Premium y Pro), FirstMove ha diseñado licencias institucionales pensadas para cámaras de comercio, centros de desarrollo empresarial e incubadoras, buscando amplificar su impacto a nivel sectorial.
Los resultados iniciales avalan la metodología. FirstMove ya cuenta con casos de éxito documentados en áreas críticas como comunicación, crecimiento de mercado y eficiencia operativa. Por ejemplo, la Clínica Biototal logró una notable mejora en su comunicación con el paciente y en la experiencia de servicio; la marca KEFI utilizó la cartografía para organizar y planificar la apertura de su segundo punto de venta; y Golden Flame consiguió un orden comercial indispensable, recuperando el foco de sus esfuerzos de venta. Si bien los resultados específicos pueden variar según la industria y la calidad de la ejecución, estos ejemplos demuestran la aplicabilidad transversal del modelo.
Esta tendencia hacia la democratización de la inteligencia empresarial no es exclusiva de FirstMove. En un mundo post-pandemia donde la digitalización es imperativa, otros actores como la chilena Klogi también han surgido, enfocándose en la automatización de procesos logísticos para PyMEs, o la plataforma Nuvei, que ofrece soluciones de pago y e-commerce sofisticadas a pequeñas tiendas, evidenciando una necesidad creciente por herramientas de alto calibre a precios asequibles. FirstMove se posiciona así en la vanguardia de esta ola, donde el software y el conocimiento se combinan para nivelar el campo de juego contra las grandes corporaciones. La compañía, que opera desde Concepción, se ha fijado una ambiciosa meta de alcanzar 100 cartografías pagadas y entregadas al mes, consolidando su posición como el «North Star» estratégico para las PyMEs latinoamericanas. La era de la consultoría inalcanzable parece estar llegando a su fin.