Chile quiere ser la sede de los Juegos Olímpicos Juveniles 2030

Chile ha dado un paso decisivo para convertirse en sede de uno de los eventos deportivos más relevantes a nivel mundial: los Juegos Olímpicos de la Juventud 2030. Se trata de una cita multideportiva de carácter internacional que reúne a atletas menores de 18 años y que se celebra cada cuatro años. Hasta la fecha, solo tres países han tenido el privilegio de acoger este evento: Singapur (2010), China (2014) y Argentina (2018).
La intención chilena fue formalizada a través de una carta enviada por el ministro del Deporte, Jaime Pizarro, al presidente del Comité Olímpico de Chile (COCh), Miguel Ángel Mujica. Posteriormente, Mujica hizo llegar esta declaración oficial al Comité Olímpico Internacional (COI), marcando así el primer hito formal en el proceso de postulación.
Esta candidatura se enmarca en una ambiciosa agenda deportiva impulsada por el Estado chileno, que en los próximos años contempla la realización de una serie de campeonatos de alto nivel, entre ellos el Mundial FIFA Sub-20, el Mundial de Ciclismo en Pista, la AmeriCup de básquetbol femenino y los Juegos Parapanamericanos Juveniles. Además, Chile ya fue designado como anfitrión de los Juegos Mundiales de Olimpiadas Especiales de 2027.
Capacidad probada y visión de futuro
En palabras del Presidente Gabriel Boric, esta postulación refuerza el compromiso del país con el desarrollo del deporte y la promoción de una sociedad más activa y cohesionada. “Esta postulación se suma a la agenda de grandes eventos que ya tenemos en curso (…), además de los Juegos Mundiales de Olimpiadas Especiales que se realizarán en Chile, en 2027”, declaró el mandatario.
El ministro del Deporte, Jaime Pizarro, también destacó que Chile posee una experiencia probada en la organización de eventos deportivos internacionales. La exitosa realización de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023, y la infraestructura de alto nivel que dejó como legado, son prueba concreta de esta capacidad organizativa. «Estamos convencidos de que la promoción y difusión del deporte son elementos centrales para una sociedad con mayor bienestar», afirmó.
El país no solo aspira a cumplir con los estándares logísticos del COI, sino también a proyectar una imagen moderna, diversa y sostenible, alineada con los nuevos principios del olimpismo juvenil.
Un proceso competitivo y millonario
La elección de la sede oficial de los Juegos Olímpicos de la Juventud 2030 será informada por el Comité Olímpico Internacional durante el primer trimestre de 2026, en el contexto de los Juegos Olímpicos de Invierno Milano-Cortina. Hasta ahora, Paraguay ha sido el único otro país en presentar públicamente una candidatura formal, mientras que Mongolia, Tailandia, Indonesia y México han manifestado interés sin oficializar su postulación.
El evento representa una inversión pública y privada estimada en 150 millones de dólares. Además, movilizará a más de 4.000 jóvenes atletas, en competencias que abarcarán entre 30 y 35 disciplinas deportivas, aún por definir. Más de 200 países serán parte de este encuentro global, consolidando su carácter universal y diverso.
Más allá del espectáculo deportivo, se trata de un proyecto que genera empleo, activa el turismo y promueve el desarrollo urbano y social a través de la construcción o mejora de infraestructura.
El semillero del olimpismo chileno
El Team Chile ha estado presente en las tres ediciones anteriores de los Juegos Olímpicos de la Juventud, demostrando el potencial del país en materia de formación deportiva. De sus filas han surgido figuras que posteriormente han brillado en competiciones olímpicas adultas.
Entre los atletas destacados se encuentran María José Poncell (vela, 2010), Melita y Antonia Abraham (remo, 2014), César Abaroa (remo, 2014), Clemente Seguel (vela, 2014), Martín Sáenz (atletismo, 2018), Mauricio Molina y Martín Vidaurre (ciclismo, 2018), y Nicolás Burgos (tenis de mesa, 2018).
Este historial refuerza la visión de que el olimpismo juvenil no solo es un evento deportivo, sino una plataforma para el desarrollo del talento, la inclusión y la proyección internacional del deporte chileno.